Para evitar seguir viviendo por encima de nuestras posibilidades y para recuperarnos de los gastos del despilfarro, nos exigían que les
entregásemos el gran botín del dinero de las pensiones públicas.
¿Quién se quedaría la todo el dinero líquido de las pensioones? Los sistemas financieros deberían comenzar a gestionarlo privadamente. La base de esta orientación se basa en dos creencias:
Creen que los sistemas financieros nunca viven por encima de sus posibilidades (nunca gastan más de lo que deben, nunca compran más bonos basura de lo que deben comprar, nunca acaparan más hipotecas basura de las que deben acaparar). Pero la crisis del 2008 desveló que esta creencia era muy falsa.
Creen que los sistemas financieros nunca se equivocan en su gestión y, por ello, gestionarán correctamente todas sus inversiones. Pero la crisis de 2008 desveló que esta creencia era muy falsa ya que se pudo comprobar cómo Bancos (Banco de Valencia, Bankia) y Cajas de Ahorros entraron en quiebra total por sus errores de gestión y previsión.